19 | 03 | 2024

Acabar con el hambre.



Por Jorge Antonio Rojas.

Yo no sé qué es el hambre, he sentido ganas de comer y he exclamado ¡Tengo mucha hambre! Pero en realidad no sé qué es sufrir de este mal, ni conozco a nadie que lo padezca. Pudiese estar cometiendo alguna imprudencia al escribir sobre este tema por ser éste un problema del cual no sufro y espero nunca estar en esa difícil situación. Aunque no por ello nadie está exento de estar al asecho de esta bestia que ataca a quienes han sido desplazados por el capital.

Desde el 21 de enero en los medios de comunicación se ha tocado con mayor interés este tema, puesto que ese día el gobierno federal anunció un programa para acabar con el hambre en México. Pero ¿qué significa hambre? Pues según el diccionario Larousse significa deseo o necesidad de comer. Entonces podemos decir que todos conocemos y padecemos el hambre. Pero se sabe bien que hay gente muriendo por esta causa, entonces podemos decir que existen niveles de hambre y ese extremo habemos quienes no lo conocemos.

Hoy en día la ciencia y la tecnología han avanzado tanto que es posible tener un mundo sin hambre, pero existe un factor que no lo permite, resulta que cualquier alimento producido es una mercancía, por lo tanto está sujeto a las leyes del mercado y si el producto se echa a perder, la empresa lo asume como merma.

Quienes sufren de pobreza extrema resultan ser las víctimas de las actividades de quienes detentan el poder económico. Por estas razones es posible preguntarse si los capitalistas están dispuestos a eliminar el hambre en México, y la respuesta es clara, sí. Resulta que, quienes sufren de este mal, su economía es local, producen lo que consumirán y el excedente lo venden a un mercado de una ciudad o pueblo cercano para tener un poco de dinero. Pero pasan muchos factores que pueden acabar con el producto y a no ser cosechado (por esto se quedan sin comer y sin dinero). Esta forma de economía no es congruente con el capital, quienes producen para consumo propio no generan ganancia para el capitalista y esto es lo que ahora se pretende con la Cruzada Nacional Contra el Hambre. El hambre para ellos (para los capitalistas) significa fuerza de trabajo ocupada para nada ¡y son 7.4 millones de personas! Así que con este programa el gobierno les llevará centros de trabajo, pero también carreteras para conectar las fábricas, servicios de agua y luz para las necesidades de los centros de trabajo y también para consumo de quienes viven ahí. Al menos eso es lo que se dice en sus anuncios de televisión y radio.

Entré a su bonita página de internet y la campaña es básica, al menos en esta etapa inicial, se trata de hacer donaciones de alimento, las empresas participan para que les deduzcan sus impuestos y así paguen menos e incluso se les devuelva una cantidad por haber hecho tan noble y desinteresada acción. También habrá brigadas de trabajo de campo donde uno puede participar como voluntario.

 

Pero estas no son las acciones adecuadas, no se trata de convertir a la pobreza extrema con hambre en pobreza sin hambre pero ahora explotada por los capitalistas. Esto no es acabar con el problema de raíz. Recordemos que la pobreza es necesaria para que los capitalistas puedan vivir boyantemente. Lo idóneo es eliminar, no solo el hambre, sino la pobreza. Entendamos pues que sólo nos queda hacer revolución y acabar con un sistema que no solo afecta a los que carecen de alimentos, sino a todos en general, hacer revolución socialista y acabar con las clases sociales. Esto sí es acabar con el problema de raíz.

Partido Comunista de Mexico

El Comunista